En el blog del compañero Joaquín Santos Martí, trabajador social de la Comunidad de Madrid, se describe el papel del Centro de Servicios Sociales de la Comarca de la Ribagorza (Huesca) durante el incendio de Castanesa, en marzo.
El reto de hacer visible el Sistema Público de Servicios Sociales
Esta semana he tenido la oportunidad de participar en unas jornadas de trabajo con los servicios sociales generales de mi Comunidad Autónoma. De entre todas las intervenciones me quedo con una que me sorprendió gratamente. Digamos que me emocionó y me llenó de orgullo de pertenecer a una profesión y a un Sistema plenamente implicados en la atención a mis conciudadanos.
Se trata de la magnífica intervención que el Centro de Servicios Sociales de la comarca de la Ribagorza (Huesca) mantuvo durante el incendio de Castanesa durante el pasado mes de marzo. Lo presentó la Directora del Centro: Mª José Gil Castañeda. En ese caso el Centro de Servicios Sociales disponía de un protocolo de actuación en emergencias que se activó inmediatamente. De hecho cuando el teléfono 112 llamó para activar el dispositivo el centro ya estaba sobre el terreno actuando.
Las compañeras organizaron la evacuación, dispusieron los alojamientos, cuantificaron y localizaron a toda la población, la tenían clasificada por necesidades, organizaron el dispositivo para evitar dobles evacuaciones a las personas más débiles, proveyeron comida, agua y medicamentos a los que lo necesitaron, atendieron en dos núcleos distintos porque el incendio traspasó la carretera que comunicaba los dos núcleos más importantes y cercanos al incendio, atendieron social y psicológicamente a sus usuarios.
Atendieron también a los efectivos desplazados para enfrentarse al incendio, les llevaron agua y comida, les procuraron alojamiento.
El núcleo principal y más cercano al incendio Las Paules corría riesgo de tener que ser evacuado. Tenían contabilizada y localizada a la población, tenían previsto su alojamiento en caso de necesidad, tenían previstas las vías de evacuación y los mecanismos para hacerlo y por si fuera poco organizaron una actividad lúdica con niños (una excursión a la localidad a la que hubieran tenido que ser evacuados en caso de necesidad) para alejarlos de la tensión y facilitar la posible evacuación.
El dispositivo estaba protocolizado y a los dos días de acabarse hicieron una evaluación en la que detectaron los fallos y preveyeron su corrección para posibles nuevas emergencias.
Las compañeras estuvieron al pie del cañón todo el tiempo que fue necesario, sin dormir, a disposición de los ciudadanos de la comarca.
Cuando oía todo esto me quedé sencillamente impresionado. Es un ejemplo de organización, de iniciativa (el protocolo lo habían preparado por iniciativa propia, se lo habían propuesto ellas a la comarca y esta había aceptado). Disponen de un teléfono 24 horas y 365 días para urgencias y emergencias y desde el atienden todo tipo de situaciones.
Y sin embargo esto es algo que me sorprende incluso a mi que estoy en el ajo. Nuestros conciudadanos desconocen que son los servicios sociales los que asumen el mando del grupo de acción social en una emergencia y que empezamos a tener muchas compañeras y compañeros muy preparados para hacer frente a estas situaciones (y a otras obviamente) En Aragón, al menos, el Colegio está más que implicado en la tarea, ofrece cursos de formación y organiza a las compañeras.
Estos casos suelen ser muy valorados por la sociedad pero en este caso no somos visibles. Se ve a los bomberos, a los forestales, a los soldados profesionales, a la guardia civil, pero no se ve a los servicios sociales.
Sirva esta entrada como homenaje a toda la gente que estáis al pie del cañón con estas y otras situaciones, yo al fin y al cabo estoy en un despacho. Pero sirva también de reflexión para pensar sobre cómo dar a conocer toda nuestra riqueza a nuestra sociedad, cómo sacarle provecho, como hacer imagen de sistema y de profesión.
Tenemos que avanzar en contacto con los medios de comunicación, en escritura profesional de la experiencia y en búsqueda de herramientas de identificación del sistema unificadas que haga que cuando hacemos cosas (especialmente las que más valora la sociedad) se nos vea y reconozca.
Atendieron también a los efectivos desplazados para enfrentarse al incendio, les llevaron agua y comida, les procuraron alojamiento.
El núcleo principal y más cercano al incendio Las Paules corría riesgo de tener que ser evacuado. Tenían contabilizada y localizada a la población, tenían previsto su alojamiento en caso de necesidad, tenían previstas las vías de evacuación y los mecanismos para hacerlo y por si fuera poco organizaron una actividad lúdica con niños (una excursión a la localidad a la que hubieran tenido que ser evacuados en caso de necesidad) para alejarlos de la tensión y facilitar la posible evacuación.
El dispositivo estaba protocolizado y a los dos días de acabarse hicieron una evaluación en la que detectaron los fallos y preveyeron su corrección para posibles nuevas emergencias.
Las compañeras estuvieron al pie del cañón todo el tiempo que fue necesario, sin dormir, a disposición de los ciudadanos de la comarca.
Cuando oía todo esto me quedé sencillamente impresionado. Es un ejemplo de organización, de iniciativa (el protocolo lo habían preparado por iniciativa propia, se lo habían propuesto ellas a la comarca y esta había aceptado). Disponen de un teléfono 24 horas y 365 días para urgencias y emergencias y desde el atienden todo tipo de situaciones.
Y sin embargo esto es algo que me sorprende incluso a mi que estoy en el ajo. Nuestros conciudadanos desconocen que son los servicios sociales los que asumen el mando del grupo de acción social en una emergencia y que empezamos a tener muchas compañeras y compañeros muy preparados para hacer frente a estas situaciones (y a otras obviamente) En Aragón, al menos, el Colegio está más que implicado en la tarea, ofrece cursos de formación y organiza a las compañeras.
Estos casos suelen ser muy valorados por la sociedad pero en este caso no somos visibles. Se ve a los bomberos, a los forestales, a los soldados profesionales, a la guardia civil, pero no se ve a los servicios sociales.
Sirva esta entrada como homenaje a toda la gente que estáis al pie del cañón con estas y otras situaciones, yo al fin y al cabo estoy en un despacho. Pero sirva también de reflexión para pensar sobre cómo dar a conocer toda nuestra riqueza a nuestra sociedad, cómo sacarle provecho, como hacer imagen de sistema y de profesión.
Tenemos que avanzar en contacto con los medios de comunicación, en escritura profesional de la experiencia y en búsqueda de herramientas de identificación del sistema unificadas que haga que cuando hacemos cosas (especialmente las que más valora la sociedad) se nos vea y reconozca.
1 comentario:
Muchas gracias por citarme. Os descubrí hace poco u ps sigo desde entonces. Hacéis un magnífico blog. Sólo una puntualización. Soy de Zaragoza, no de Madrid. Un saludo.
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